Por cuestiones laborales, elegimos noviembre, "el mes de los vientos" (no lo sabíamos). Del lado chileno, en la ruta que va de Puerto Natales a Punta Arenas, hay dos monumentos de metal referidos al viento. Es increíble que la gente pueda vivir en esas regiones.
Tal vez algunos de ustedes hayan visto en internet, el relato de viaje de un muchacho y su novia que, a bordo de una Yamaha 125, recorrieron la Argentina. Ellos eligieron el mes de febrero para emprender el viaje, un mes con ¡poco viento!
En la "ruta" 40 el viento los tiró de la moto y no pudieron levantarla hasta que el conductor de una camioneta paró y les hizo reparo. Después, tuvieron que tirarse a la cuneta para aprovechar el reparo del terraplén del camino y viajar así los doscientos kilómetros que les faltaban para llegar a Tres Lagos. Tardaron "solo" diez horas en llegar.
Por suerte, durante los largos kilómetros de ripio que nosotros hicimos, no nos comimos vientos tan fuertes.